lunes, 7 de septiembre de 2020

Doble carambola.

 

La primera cita con Mj.  resultó agradable y prometedora, aunque formal.  En la segunda, tres semanas después, la recojo junto a la Farga de Hospitalet, cerca de su casa. Lleva unos pantalones blancos ceñidos que resaltan sus piernas y un culo bien contorneado...  Melena negra y bonita sonrisa.

 

La llevo a cenar al Salon, en el barrio Gótico. Le gusta el sitio y la cena. Charla animada, mirándonos a los ojos. Pago la cena y nos acercamos al Paraigua. En esta época es un local de territorio guiri, pero los grupos que tocan son buenos y, lo más importante, hay sofás para sentarse cómodamente juntos.

 

Ella pide un gintonic, buena señal. Hablamos un rato de música y bandas, y finalmente traen los gintonics.  Me dice que se siente a gusto, con lo que ya no espero más y uso la clásica fórmula de probar su gintonic en sus labios...

 

Seguimos un rato explorando labios y lenguas. Me dice que beso muy bien… Ya, ya lo sé. No es la primera que me lo dice. Respondo con la también clásica fórmula de que también hago muy bien los masajes...  Se ríe.

 

Al rato salimos del local. Dice que no quiere callejear más. Le pregunto si le apetece el masajito. Dice que sí.

 

A 180 por la autopista desierta. 


Llegamos a casa, enciendo velas y música.  Cuando sale del baño dice que le gusta la habitación. La beso y se deja quitar los pantalones y camiseta. Se tumba sobre la cama boca abajo. Yo también me desnudo y le hago masaje de espalda unos minutos, luego deslizo sus bragas por sus piernas y continúo el masaje, nalgas, piernas, pies. Le chupo los dedos de los pies y gime de gusto. Subo para lamerle el coño pero no me deja. Se da media vuelta, ya excitada. Le como los pezones mientras exploro su coño con dos dedos. Está ya muy húmeda. Le toco el punto G y gime cada vez más excitada. Ya cambio postura para acercarle la polla a la boca, se la come sin dudar. Lo hace muy bien, hasta dentro, y sabe alternar dedicándose al glande y también a los huevos.  Me recreo un rato en el asunto.

 Me pongo un condón y la penetro por delante. Mentalmente me anoto el número correspondiente. La 30.  

 Gime al metérsela. Follamos asi un rato, le levanto  las piernas. Como es delgada puede subir la pelvis, estamos un rato asi, ella gime con intensidad varias veces y al final pongo sus piernas sobre mis hombros, bombeo fuerte, ella intensifica sus gemidos, a punto del orgasmo, y yo me dejo ir.

 Descanso.  Abrazos, sonrisas. Dice que soy un maestro…  Bueno, no es para tanto. Todo es relativo en esta vida. 

Dice que le recuerdo a Jack Nicholson. 


 La llevo a casa y me vuelvo a dormir. Son las 4.30.  Mañana he quedado con Mr.

 

Me levanto a las 10 y  quedamos a las 12. Ordeno un poco la casa por si acaso pero no tengo muchas expectativas con Mr.  Estuvo tan seria y correcta en la primera cita…

 

Llega un poco tarde, aparece tranquila, con su sonrisa de ojos claros. Definitivamente es una mujer hermosa a sus 45 años.  La llevo en coche a Vilanova, a navegar en velero. Apenas hace viento. Ella  no ha navegado nunca así que hago un paseo corto y vuelvo a puerto por si acaso se marea. Ella dice que le gusta pero se expresa con tanta calma y corrección, con flema británica diría yo, que no acabo de ver feeling.

 

Sin embargo parece estar a gusto.  La llevo a comer al paseo marítimo. Pagamos a medias. Hablamos de igualdad de género, discriminación positiva, polemizamos un poco. Conversación tranquila y civilizada. Demasiado tranquila y civilizada. Pocas risas, sigo sin ver feeling. Pienso en ello mientras voy al lavabo. Hay poco que hacer.

Salimos del restaurante, propongo un paseo por la playa, ella pregunta si tengo prisa.  Digo que no. La paciencia es la mejor virtud del cazador...

 

 Vamos al coche a renovar el ticket y le digo si le apetece un café en mi casa. Ella objeta que si llevo a casa a todas, le digo que nooooo…   que con ella es todo diferente.

 

Para mi sorpresa, acepta ir a mi casa. En el coche suena George Michael. Ella me pide música animada, y se pone a bailar en el asiento… ¿esto se anima…?

 

Entramos en casa, le gusta la decoración. Vamos a la cocina y voy haciendo el café. Estamos los dos de pie apoyados en el mármol, cerca uno del otro.  Está claro que ella está a gusto, yo me acerco un poco y ella no se aparta, sobran más palabras.

 

Beso largo largo largo largo…  boca, cuello, le digo que me gusta su perfume, dice que no lleva, pues mejor aún… delicioso olor corporal.  Le subo un poco el jersey, beso su abdomen liso, intento desabrochar pantalones, a ver hasta dónde llego…

 

 Dice que no tan rápido,  ok sigo besando y le quito jersey, se deja, bonito sujetador, bonito pecho, bonita piel. Uff me esta gustando y la verdad no me esperaba triunfar hoy.  Me quita ella la camiseta… y parecía tan seria…  Le sugiero masaje y vamos a la habitación, ella ya sin jersey.  De nuevo le gusta la decoración….  enciendo velas , música. Sigue sin querer quitarse los pantalones, se tumba en la cama boca abajo, hago masaje de nuevo… Se repite la escena de anoche,  todo tiene un aire un tanto irreal, como si estuviera  dento de una película.

 

Desabrocho sujetador.  Yo me quito pantalón, por comodidad, ya solo slip.  Voy intercalando besos en su piel desnuda. Dejar fluir, quiere ir despacio. Se da la vuelta, quedan sus pechos al descubierto. Beso sus pezones  suavemente y ahí ya empieza a flaquear, a excitarse. Meto mano bajo pantalón por detrás y se va calentando, ya acepta pantalones fuera, también bragas…

  

Me tumbo encima de su cuerpo desnudo,  caricias ,abrazos, le beso los pezones y  busco su coño con los dedos por detrás. Está húmedo, exploro lentamente, introduzco un dedo, gime de gusto,  insisto unos minutos  y jadea,  a punto de correrse...   Me quita el slip. Intento que me la chupe pero no quiere y tampoco me deja que le chupe yo el coño. Vaya por dios.  El mismo bloqueo que Mj.  anoche…

 

Dedico mucho rato a contemplarla mientras la acaricio, repito el masaje de espalda.  Tiene un cuerpo precioso, tetas grandes, un culo sin un gramo de celulitis, una preciosidad.

 

Después de que casi se corre con los dedos le digo que quiero hacerle el amor y me dice que si. Es flipante, dos en 24 horas… esto no me pasa todos los días.  Ya cojo un condon y de nuevo le pido que me la chupe, accede. No lo hace tan bien como MJ,  pero el goce psicológico es indescriptible.

 

Me pongo el condón y la penetro por delante. La 31...  


Ella gime de gusto. Bombeo un rato, se excita, le levanto las piernas y eso no parece gustarle. Seguimos un rato pero veo que ha perdido el punto. Le pregunto  si prefiere ponerse encima.

 

Me tumbo boca arriba y  ella se introduce mi polla y empieza a moverse, es un placer verla cabalgarme, se inclina hacia delante y mueve el culo, le agarro las nalgas, esto es el cielo, es una de las mujeres más bellas que he follado.

 

Se mueve con movimientos amplios y al final se acaba saliendo bruscamente. Bueno, me dice que siga yo, que se ha pasado de vueltas… La pongo boca abajo, le hago levantar el culo y la penetro desde atrás. Tras un rato bombeo con furia y acabo agarrando su cabellera, estiro su cabeza hacia atrás al tiempo que le sujeto ambas manos en la espalda mientras la penetro...  el placer de la dominación...  me corro.

 

Ella no ha llegado. Le pido excusas, me pregunta educadamente si la he montado a gusto, me río de su punto irónico. Es sarcástica y burlona, tiene peligro… lo mismo me acaba gustando de verdad. 


Dice que ha sido por ella, que estaba cohibida, que todo le parecía muy extraño, no esperaba acabar el día así, que apenas nos conocemos… pero que no me preocupe, que ha estado muy bien y que ella es de orgasmo fácil…

 

Ha quedado a cenar con unas amigas. La llevo en coche hasta donde ha aparcado el suyo.  Nos despedimos, ella de nuevo se muestra serena, inalterada, sin perder las formas.

 

Me dice que le recuerdo a…  Jack Nicholson.  

 

Me quedo un rato en la playa. Necesito contarle todo esto a alguien.  Empiezo a asustarme ante estas maniobras del destino.


(Octubre 2013)



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